Catalana de nacimiento y aragonesa de crianza Carmen París es una cantante de registro amplio y ningún prejuicio musical. En su historia ha compuesto y cantado de todo, si bien ha adquirido notoriedad años por sus reinterpretaciones a la luz del jazz, son, o la música del Magreb de algo tan peculiar como la Jota, que en su gran voz parece venida de cualquier parte del mundo.

De preparación jazzística y cabaretera, y experiencia en las orquestas de baile, Carmen París lleva revolucionando la jota desde su primer disco (preparado con Chano Domínguez, Colina y McGuill) Pa' mi genio, que rozó el disco de oro y fue elegido el ‘Mejor Álbum’ de Música Tradicional en los Premios de la Música de 2003. Al año siguiente recibiría el Premio Nacional de Músicas Actuales, al considerar el jurado que ha elevado la jota “a nivel internacional” con su voz “excepcional y arrolladora”.  Por no hablar de un carácter también tan rotundo como una Jota de frente y sin frenos.

Tras aquel disco llegarían ‘Jotera lo serás tú’, con aromas mediterráneos y cadencias árabes, e InCubando, gestionado y grabado como su propio nombre indica en la isla de en Cuba. Luego volvería a grabar retomando aquellos inicios jazzísticos, aunque en versión internacional: Ejazz, grabado en Boston con la Concert Jazz Orchestra de Greg Hopkins -una big band formada por 16 músicos de reconocimiento internacional- con George Garzone, Joel Rosenblatt y Melissa Aldana como invitados especiales, en el mítico estudio, Blue Jay. 

Aunque la hemos visto con diversos acompañamientos, en directo se bate sola como casi nadie en este país, pues despliega también sus nada desdeñables habilidades como entretenedora, como ella misma dice, con directos: “sencillos, directos y esenciales, con canciones completamente desnudas y sin efectos”.