Justin Bieber
Estilo: Pop
Algunos cantantes que se convirtieron en ídolos para el público juvenil han conseguido mantener sus carreras durante muchos años, mientras que otros se quedaron en el camino. En España, Miguel Bosé empezó como fenómeno de fans pero supo adaptarse, amoldarse a las nuevas circunstancias que acarreaban su edad y, manteniendo a una buena parte de sus seguidores, ganar otros nuevos. De otros, como Iván o Pedro Marín, apenas queda un leve recuerdo.
Justin Bieber (Ontario, Canadá, 1994) robó el corazón de miles de quinceañeros de todo el mundo cuando él tenía precisamente esa edad y grabó su primer disco. Acumuló desde entonces números uno en listas como el Billboard y se convirtió en una estrella internacional del pop. Fue el protagonista de su propio documental, hizo una incursión en el cine y siguió robando corazones aquí y allá.
Ahora, después de su sexto álbum -titulado ‘Justice’ y publicado en 2021-, el canadiense es distinto al que era cuando empezó. Ha confesado que tanto acoso de los fotógrafos y las fans, que se llaman a sí misma beliebers, haciendo un doble sentido entre su apellido y el hecho de que crean en él como una especie de dios terrenal, terminó agobiándole y conduciéndole a la depresión, y de ahí al consumo de ansiolíticos y cannabis –mala mezcla- para escapar de la angustia. También se vio envuelto en algún que otro incidente, en parte por su mal genio.
Se acerca a los treinta años, está casado y se supone que ha dejado atrás algunas costumbres que no le venían bien. Por así decirlo, Bieber se encuentra en una encrucijada, personal y, para lo que aquí importa, musical. Podrá seguir tirando de sus hits, claro, seguro que le siguen rentando, pero eso no va a servirle siempre. Como tampoco sus rabietas o sus enfrentamientos con otros famosos, como Kanye West. Si de verdad aspira a dejar huella como músico, es el momento de demostrarlo.