La televisión podrá tener sus defectos, pero ha hecho mucho por revitalizar la carrera de un montón de artistas. Un ejemplo es Lucrecia, cantante nacida en Cuba pero afincada en España que acumula en su carrera diez discos de estudio e interesantes colaboraciones con artistas de renombre, pero que es más conocida para el gran público como presentadora de programas para niños como Los Lunnis. Y esto último no tiene por qué ser una mancha en su expediente, por supuesto que no.

Lucrecia Pérez Sáez es una artista de formación clásica. Estudió piano y canto y siendo joven se enroló en la orquesta Anacaona, que tuvo cierto éxito en Hispanoamérica. En un momento dado, tras actuar varias veces en Barcelona, decidió que ése era su sitio y se quedó a vivir allí.

Su primera grabación data de 1994 y se llama ‘Me debes un beso’, de clara influencia cubana. También se notaba eso en su continuación, ‘Prohibido’, disco publicado en 1996 y que incluía la canción ‘La noche de la iguana’. Fue su primera colaboración, aunque en este caso involuntaria, con un medio audiovisual, porque fue el tema central de la película ‘Balseros’.

El gusanillo del cine debió picarle, porque en 1999 inició su carrera como actriz en la película ‘Ataque verbal’. Y la gran pantalla le abrió las puertas de la pequeña, porque en el año 2001 fue jurado en el programa ‘Lluvia de estrellas’ y en 2003 empezó a conducir el ya citado programa ‘Los Lunnis’, con el que ha logrado ser una celebridad en España.

Pese a que la tele y el cine consumen gran parte de su tiempo, no ha descuidado nunca su carrera como cantante, en la que ha seguido siendo fiel al bolero y otros sones de su país de origen, pero también se ha preocupado de mezclarlo con otros estilos más bailables y de raíz anglófila.