Nora Norman
Nació en 1992, se llama Nora Norman aunque nació en Sabadell y desde el año pasado reside en Madrid. Su voz dulce pero afilada y bien modulada contrasta con una figura desafiante en la que los piercings, los tatuajes y el pelo corto le imprimen una imagen contestataria que no desentonaría junto a las de la Nina Simone o la Abbey Lincoln más políticas. Algo tiene que ver con ellas, pues su propuesta se podría calificar de neo soul, y entre sus referentes se suelen mencionar los nombres de Lauryn Hill, The Fugees, John Legend, Sam Smith, Benjamin Clementine, Billie Holiday y por supuesto Stevie Wonder. Ella misma confiesa que fue con los discos de este último, que escuchaba de pequeña cuando su padre los ponía sobre el tocadiscos.
Estudiaba para ser diseñadora, le encantaba el estilismo y la moda pero algunos vídeos colgados en YouTube en 2013 llamaron la atención de festivales como el Mulafest o el evento de homenaje a The Beatles que organizó El País. Al año siguiente actuó en el 101 Sun Festival y el mismísimo Nick Waterhouse, una de las figuras más destacadas del revival del rhythm&blues norteamericano, la escogió como artista invitada durante su gira española.
En 2015, ya instalada en Madrid, se convierte en una de las sensaciones del vigoroso circuito de salas y pequeños clubs de la capital, se integra en el colectivo Dremen y participa en iniciativas como Madtown Days. Mientras desarrolla un proyecto paralelo escorado hacia la electrónica con el nombre de N.N. completa su grupo de acompañamiento con Jorge Mostaza a la guitarra, Víctor Elías al teclado y Gastón Padula a la batería, todos ellos experimentados músicos de la escena jazzística madrileña.
A finales de febrero de 2016 publicó su primer ep de estudio, un disco que le sirve de carta de presentación, y que efectivamente muestra su facilidad para los medios tiempos y la naturalidad de una propuesta que ella afronta desde lo intuitivo y lo emocional.
Tras la publicación de su segundo trabajo en Abril de 2018, esta vez de larga duración, la artista de Sabadell mantuvo la espontaneidad que la condujo a Madrid hace años persiguiendo la magia de la música.