Paul Alone

Paul Alone
Paul Alone

El pop melódico es un estilo que nunca pasa de moda y en el que se mueve como pez en el agua Paul Alone, de nombre real Pablo Sola (debió pensar que la traducción más o menos fidedigna al inglés le venía bien) que nació en Pamplona en 1996 y que es uno de esos muchos artistas que han visto catapultada su carrera gracias a la televisión.

Cuando tenía sólo veinte años, este cantautor participó en el programa La Voz y su voz rasgada llamó la atención del asturiano Melendi, que se convirtió en su mentor y le recomendó, por cierto, que siguiera cantando en español... aunque conservara su nombre artístico en inglés. También lo llevó de telonero en algún concierto.

Su estilo es fácil y asequible, mientras que su estética es algo más canalla, del tipo cuidado-descuidado. Esa mezcla le ha funcionado y en pocos años, después de foguearse en salas madrileñas como Costello o Mon. Su éxito fue creciendo paulatinamente, hasta el punto de que el concierto final de su gira de 2022 fue en la también madrileña sala Joy Eslava, donde caben más de 1.500 espectadores.

Poco antes de eso, la tele había vuelto a echarle una mano. Esta vez a través de su participación en el programa Dúos Increíbles, donde entabló relación profesional y personal con Ana Belén, Ainhoa Arteta o Víctor Manuel, entre otros. Mientras tanto, ha subido periódicamente sus canciones a las plataformas y la respuesta del público ha sido apabullante: ‘Te acuerdas’, lanzada en 2021, logró casi seis millones de reproducciones en spotify.

El artista, que también despunta en el campo de la fotografía, ha recopilado diez de sus canciones en ‘¿Y yo qué sé?’, publicado en 2022 en formato digital y del que él mismo destaca que su nombre es una consecuencia de su propia inseguridad: “Cambio de opinión cada cinco minutos, cuando creía saberlo todo, no tenía ni idea. Cuando acepté que no tenía ni idea empecé a entender ciertas cosas, cosas que aún no entiendo. No entiendo nada pero qué bonito es estar vivo para seguir aprendiendo”. Lo dice alguien que todavía tiene una larga carrera por delante.