Ska-P

Ska-P
Ska-P

Ska-P, el orgullo de Vallecas, sigue dando satisfacciones a sus muchos seguidores cuando ya acumula casi tres décadas de existencia. La fórmula es la de siempre: canciones aceleradas, claramente deudoras del ska jamaicano y letras de contenido social y comprometido. Si hay algo que ha quedado meridianamente claro desde que empezaron, es que Ska-P se mojan.

Aunque ha habido en su seno algunas pérdidas importantes y periodos de barbecho, lo cierto es que la banda nunca se ha disuelto en todos estos años. Roberto Gañán, más conocido como Pulpul, ha sido siempre su cantante y principal componente. El bajista Julio César Sánchez y el teclista Alberto Javier Amado ‘Kogote’ también permanecen de la alineación original, en la que hasta podría incluirse al guitarrista José Miguel Rodin ‘Joxemi’ porque entró en 1995.

Sus cantos a favor de la legalización de la marihuana y en contra del fascismo, de la tauromaquia o de los curas les hicieron ganarse el favor del público casi desde el principio. Ska-P fue un grupo que cayó de pie porque ya en 1995, con sólo un año de vida, teloneaba a gente de la altura de Platero y Tú o Extremoduro.

Discos como ‘El vals del obrero’ (1996) o ‘Planeta Eskoria’ (2000) catapultaron la carrera de un grupo que con el tiempo empezó a tener público también en varios países europeos y por supuesto en Hispanoamérica. Por eso en sus giras empezaron a incluir conciertos en Holanda, Bélgica, Alemania, Austria, Italia, Puerto Rico, Uruguay, Colombia, Venezuela… Y aunque reivindicaron siempre su independencia, lo hicieron grabando para multinacionales como RCA, BMG o Warner.

En 2005, como consecuencia de discrepancias internas, el grupo, por así decirlo, decretó un cese temporal de sus actividades que se prolongó dos años, al cabo de los cuales volvió a la carretera y a los estudios para registrar discos como ‘Lágrimas y gozos’ (2008) o ‘99%’ (2013).

En 2015, Ricardo Delgado ‘Pipi’, cantante junto a Pulpul y verdadera alma del grupo en directo, anunció su marcha, en tanto que Pulpul confesó que padecía problemas de oído, los temidos acúfenos. Parecía el final, pero en 2018, tras el segundo y obligado parón, el grupo publicó ‘Game over’ y lo hizo con la fórmula de la autoedición, algo coherente en una formación que, cuando fue nominado a los Grammy Latinos por ‘99%’, anunció que no iría a la gala y que prefería que el premio se lo dieran a Barack Obama para que lo colgase junto a su Nobel de la Paz.

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