Kadec Santa Anna

El rapero Kadec Santa Anna es un claro ejemplo de que los tiempos, musicalmente hablando, han cambiado. Es un artista que se mueve bastante más por las redes sociales que por los medios hasta ahora considerados convencionales y del que se tienen más en cuenta las reproducciones de sus temas en sitios de internet como Youtube que las ventas de sus discos.

En realidad, más que de discos, en su caso hay que hablar sólo de uno. Se llama ‘Cachitos de mi cora’ y lo autoeditó en 2020 en un sello que se llama, para no dejar lugar a la duda, Kadec Santa Anna. Ahí se recopilan canciones que ya había lanzado en plataformas diversas, como ‘Afloja’, ‘Carta de despedida’, ‘Todo este desastre’ o ‘Has visto qué suerte’, que tienen por cierto millones de reproducciones en sitios como Spotify. El signo de los tiempos, de nuevo.

Como les sucede a otros muchos raperos, es alguien que no suele revelar mucho de sí mismo. Se sabe que nació en Barcelona y que empezó a hacer rimas en el año 2017. Con ellas compitió en las populares batallas de raperos que se celebraban en su barrio. Sus letras hablan fundamentalmente de amor –“Quiéreme por si las cosas se tuercen. Perdóname cariño porque soy un torpe. No sé valorarte, me viene grande quererte. Contigo vuelo alto sin pasaporte. Llévame a un lugar que estemos juntos para siempre. Estoy roto, ten cuidao, no te cortes. Tú eres mi soporte, mi amuleto de la suerte”, recita en ’22 daños’- , porque lo suyo no deja de ser el típico chico busca chica pero revestido con otro ropaje más contemporáneo.

Y aunque es jovencísimo, parece que en algunas letras evidencia que le está llegando, en cierto modo, la madurez. “He cambiado salir de fiesta por quedarnos viendo pelis, por mirar los vídeos que tenemos juntos en el móvil”, proclama en ‘Has visto qué suerte’, donde por lo demás deja claro que el lenguaje políticamente correcto no es el único que sabe emplear. “Porque cuando estoy contigo, al resto que le den por culo” o “Sólo tú me pones freno cuando voy cuesta abajo, cuando tengo ganas de mandarlo to’ al carajo”, dice en otros dos pasajes de esa misma canción.