Javier Álvarez, el titiritero que llegó a ser número uno de los cuarenta sin querer, y Lorenzo Vilches, el cantautor pianista que mezcla en sus canciones el espíritu de Antonio Vega con el de Krahe, el jazz con el pop, la sonrisa con el escalofrío, hacen un recorrido conjunto por sus discografías.

Lorenzo Vilches es un pianista, cantante y compositor que después de trabajar junto a multitud de artistas de pop, flamenco, rock y otras músicas se decidió a amalgamar sus propias influencias musicales en 2013 con un primer disco en solitario grabado en directo, para después presentarlo en salas de todo el país, como Clamores y Galileo de Madrid, Fizz, de Barcelona, La Estación, en Sevilla, Sonar en Santiago, Vamp, en Palma de Mallorca…

Javier Álvarez forma parte de la nueva generación de cantautores madrileños que surgió en la década de 1990, en la que se incluyen también otros como Antonio de Pinto, Ismael Serrano, Miguel Dantart o Quique González. En 1991 se traslada a Londres dónde comienza a actuar al adquirir su primera guitarra en la capital inglesa, regresando a España para tocar en el metro de Madrid y en el parque del Retiro. Con el tiempo pasó a ser habitual en el repertorio de bares y cafés como el Libertad 8, donde coincidió con otros cantautores como Pedro Guerra. Ocho discos avalan su trayectoria desde principios de los 90. Su último trabajo, Guerrero Álvarez, está realizado a partir de poemas de Pablo Guerrero, que participa en el disco recitando sus versos. Con éste disco obtiene el Premio de la Música 2010 al mejor álbum de pop alternativo.