The Clams

Es casi imposible permanecer impasible mientras suenan The Clams. Su simpática y bien resuelta mezcla de soul y blues, con briznas de rock and roll de la vieja escuela, hará al oyente, por lo menos, mover la cabeza a un lado y a otro. Y seguramente no quedará ahí la cosa y al cabo de pocos segundos observará, atónito, cómo se le mueven también los pies.

Este numeroso grupo femenino debutó en el mundo de la música en el año 2013 con un álbum de cinco canciones llamado ‘She can do it!’. Ahí dentro había ritmo, sentimiento, una sección de vientos de las que quita el hipo y una producción muy acertada. En el primer tema, por cierto, colabora Eva Amaral. Aunque lo hace de forma discreta, sin restar protagonismo. La famosa aragonesa aporta su armónica.

En coordenadas similares, el septeto reincidió en 2016 con ‘Deja Vu’. A esas alturas ya se había hecho un hueco en el panorama de salas de conciertos de Madrid. Motivos no les faltaban para funcionar bien, porque les sobra pericia musical. De hecho, sus componentes ya aportaron al llegar una dilatada experiencia en otras bandas.

Como a todo el mundo, la pandemia les ha supuesto un parón del que ahora empiezan a recuperarse. Están fritas por grabar de nuevo, por hacer bolos aquí y allá y por volver a decirle al mundo que son “happy as a clam”, que así se titula una de sus canciones. O sea, felices como una almeja. Aunque al escucharlas y verlas sudar en el escenario, da la impresión de que lo son mucho más.