Nancys Rubias

Nancys Rubias
Nancys Rubias

Lo que nació en 2004 como un divertimento de cinco ‘rock stars’ sin corona, con la única idea de dar un concierto en play-back en una sala de Madrid, ha terminado transformándose en un grupo-performance capaz de llenar el madrileño Circo Price, donde caben más de 2.300 personas, para una de sus sesiones-concierto (la voz es en directo, la música está grabada). Nancys Rubias es una formación a tiempo parcial liderada por Mario Vaquerizo y casi completamente dependiente de Fangoria, a la que suele telonear en sus bolos. De un estilismo muy cuidado, en la era post pandemia han adoptado la feliz y colorista estética de la California del 68.

Convertido en una estrella mediática de apretadísima agenda, al periodista multitarea Mario Vaquerizo, que en su día fue manager de grupos exitosos como Dover, le queda tiempo para ser una estrella televisiva, participando en realitys y haciendo publicidad, pero también para publicar algunos libros, como la bio de Fabio Mcnamara, su autofilosofía de vida: el  ‘vaquerizismo’, y hasta alguno infantil. No obstante, esa agenda tan apretadísima no le impide sacar a pasear a sus Nancys cuando hay ocasión.

Su particular ‘air-group’ tras el que se encuentran como compositores Nacho y Mauro Canut, con JC Moreno desde la sombra, se completa, cómo no, con las Nancys: Anoréxica (Mario Vaquerizo), Travesti (Juan Pedro del Moral), O (Marta Vaquerizo) y Reagan (Miguel Balanzategui), que son quienes se ponen frente al público. La agrupación original incluía a Susie Pop, la verdadera Nancy Rubia ya que lo era realmente, que falleció en 2008. 

En lo musical, Nancys Rubias se mueve en el terreno del pop bailable con tintes electrónicos y una estética marcadamente glam. Debutaron en 2005 con un disco homónimo al que siguió, dos años después, ‘Gabba Gabba Nancy’’, un claro guiño al grito de guerra de los Ramones, de quienes son deudores, si no musicalmente, al menos en parte sí en su vestimenta. Lo que pasa es que Nancys Rubias son más eclécticas y no esconden su admiración por cantantes como Camilo Sesto, cuyo estilo no puede ser más opuesto.

Con ganas de provocar, pero sobre todo de pasarlo bien, posteriormente han sacado otros tres discos, todos ellos en su compañía de siempre, Warner. En ‘Marcianos ye-ye’, lanzado en 2017, continúan en su línea petarda, desinhibida y un punto gamberra. Ese disco y los anteriores los pasean a menudo en salas y festivales de toda España, a veces en solitario pero sobre todo precediendo en escena a Fangoria, grupo del que Vaquerizo es manager y algo más, porque su mujer es Alaska, la reina indiscutible de la tan comentada Movida Madrileña.